El gruñido es una conducta que en el cachorro es necesario redirigir porque, si no en el futuro será un adulto dominante e incluso agresivo con sus dueños y con otros perros.
Un cachorro educado será un adulto equilibrado"
Su función primordial es comunicar el estado agresivo del emisor. Generalmente va acompañado de posturas como rejas agachadas, cola erguida, enseñan los dientes, pelo erizado, dilatación de pupilas, etc.
El periodo crítico de la socialización de un cachorro transcurre desde su nacimiento hasta el tercer mes de edad; en este periodo es cuando nosotros tenemos que encauzar sus conductas.
Una vez pasados los tres meses de edad no está todo perdido, existen métodos y tratamientos para reconducirla.
Algunos consejos prácticos para evitar el mal comportamiento de nuestra mascota (siempre es mejor acudir a la ayuda de un profesional:
- No debemos jugar con agresividad, ni al tira ni afloja
- Cuando gruña, no debemos castigarle físicamente, solo actuaremos bájale el hocico hacia el suelo hasta que deje de gruñir. Si el perro es pequeño, volteale pata arriba y sujétale del cuello
- Cuando el animal gruña a algún desconocido, veterinario, transeúnte, etc. no lo acariciaremos para tranquilizarlo porque premiaríamos su acción. Lo que haremos será todo lo que hemos dicho con anterioridad.